
La rana saltó a la falda de la princesa y le dijo:
- "Hermosa dama, en un tiempo fui un apuesto príncipe hasta que una bruja malvada me hechizó. Sin embargo, bastaría un beso tuyo para que volviera a ser el gallardo y joven príncipe que soy. Entonces, encanto mío, podremos casarnos y formar un hogar en aquel castillo donde tú prepararás mis comidas, limpiarás mi ropa, me darás hijos, y te sentirás feliz y agradecida haciéndolo por siempre jamás".
Aquella noche, mientras se comía un plato de ancas de rana ligeramente salteadas, la princesa se reía para sí y pensaba:
"Y una mierda".
Extraido de: La vida frenética de Kate (Allison Pearson).
Imagen: Mats Bergen
¿Será esto lo que acabaremos contandole a nuestras hijas antes de ir a dormir? Menos mal que se lleva más el buscar a un príncipe azul que a una rana encantada, por que tendrían los días contados jeje.
- "Hermosa dama, en un tiempo fui un apuesto príncipe hasta que una bruja malvada me hechizó. Sin embargo, bastaría un beso tuyo para que volviera a ser el gallardo y joven príncipe que soy. Entonces, encanto mío, podremos casarnos y formar un hogar en aquel castillo donde tú prepararás mis comidas, limpiarás mi ropa, me darás hijos, y te sentirás feliz y agradecida haciéndolo por siempre jamás".
Aquella noche, mientras se comía un plato de ancas de rana ligeramente salteadas, la princesa se reía para sí y pensaba:
"Y una mierda".
Extraido de: La vida frenética de Kate (Allison Pearson).
Imagen: Mats Bergen
¿Será esto lo que acabaremos contandole a nuestras hijas antes de ir a dormir? Menos mal que se lleva más el buscar a un príncipe azul que a una rana encantada, por que tendrían los días contados jeje.
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